¿Qué es un simulacro de emergencia?
Un simulacro de emergencia, como su propio nombre indica, es una simulación de una situación de emergencia donde se busca vivir de una manera ficticia, las dificultades que se generarían en una situación real, ya sea causada por un incendio, alarma de bomba, inundación, etc., sin el estrés que en este caso se produce.
Otras definiciones pueden ser “Ejercicio en vivo en el que las personas que participarían en una emergencia, aplican los conocimientos y ejecutan las tareas que le están asignadas, ante un escenario planteado a fin de resolver las situaciones o problemas presentados” y también “Un simulacro es la simulación de un siniestro que suponga la activación del Plan de Autoprotección y permita comprobar la capacidad de respuesta y el nivel de preparación alcanzado, empleando los medios previstos”.
En la actualidad todavía no se le ha dado la importancia que merece la realización de simulacros de emergencia. El simulacro sigue siendo una actividad que siempre se deja para el final y, al final, no se realiza. En muchos casos se queda archivada como una actividad pendiente de realización.
En la Norma Básica de Autoprotección, en el Capítulo 9.Mantenimiento de la eficacia y actualización del Plan de Autoprotección, se encuentra el apartado 9.3. Programa de ejercicios y simulacros, en el que se deben detallar los simulacros realizados. La periodicidad mínima de estos es la que fije el propio plan siendo, al menos, una vez al año.
Un buen simulacro de emergencia comprende las siguientes fases:
- Fase de Preparación, en la que se seleccionan los elementos del ejercicio: objetivos, riesgo que se simula, personal participante, alcance, día y hora, escenario, acciones a realizar, responsables de su ejecución, etc.
- Fase de Ejecución, en la que se desarrolla la práctica del ejercicio.
- Fase de Valoración, en la que se evalúan los resultados: reunión con responsables, redacción del informe, conclusiones y comunicación a los participantes.
